Al Traves del Cristal
Gritos del Alma
Bibliographie
................
FrançaisEnglishEspañol
GRITOS DEL ALMA
TRIUNFO AMOR
-

Las lágrimas Mujer
que bañaron tu almohada
cuando tus hijos dormían
han podido llenar un río.

Las canas precoces
y las arrugas disimuladas
eran producto de dolores y de tristezas.
Mujer, paciente y tenaz.

Quisiste morir muchas veces,
pero ese amor de madre
te permitió triunfar; nunca tus
hijos supieron lo que sufriste.

Los tabúes, las cadenas de la sociedad,
eran látigos que fustigaban
ese amor verdadero
del hidalgo caballero que te raptó.

De tu cárcel y verdugo,
galopando desiertos y estepasd áridas;
durmieron bajo tormentas
resistiendo en el tiempo.

Te dio seguridad para tus hijos
y nació el fruro de ese amor,
bautizado mil veces con besos
y bañado en lágrimas.

¡ Que bello el niño! ! Idéntico al padre!
Inteligente, noble, alegre y fino
como sólo nacen hijos del amor.

Pasó el tiempo y galopando
en él, truenos y rayos
asustaban los corceles que
llevaban la raptada estrella.

Pero el lucero perdía brillo
y fuerzas ante el huracán y el viento
y un día se bajó del corcel
dispuesta a aliviarle la carga.

Lánguida, cubierta de un velo,
caminó... hasta sangrar sus piesecillos,
desplomándose al borde de un abismo.

El hidalgo caballero, galopando
día y noche, buscaba su lucero.
Peleó contra soldados, saltó murallas,
cruzó estepas y tuvo frío en el alma.

Sólo miraba el horizonte,
la vida le sonreía siempre.
Su don de gente, su señorio,
su profunda fe, ¡sabía que Dios es amor!

De rodillas en el desierto, sediento,
arrojó su espada y manto
y bebió la hiel del espejismo;
se había secado el río.

Pero estaba a diez metros del abismo
¿Qué tiempo pasó? No suo decirlo.
Creyó morir, cuando de pronto,
al levantarse, vio a la lejos su lucero.

Se levantó con fuerzas divinas
y en sus brazos tomó la doncella
que sin conocimiento, bella,
yacía en brazos de la muerte.

La llenó de besos y caricias,
la llamó como sólo él sabía hacerlo,
pero ella inanimada no volvía.
El jinete galopó deseseperado con la doncella.

Se detuvo en la fortaleza
donde su hijo agonizaba de dolor
¡Padre! le dijo: ¿encontraste a mi madre?
- Hijo, está muerta.

Colocáronla en una cama llena de rosas,
cubriéndola de besos y, de tanto llorar,
se levantó uno nube en el cielo
que hizo caer el rocío sobre la tierra.

Padre e hijo agotados, vigilaban, cuando
de pronto, más bella que una estrella
se levantó la doncella hermosa y bella.

Y abrazándolos, sonrió.
¡Santo! ¡Santo! ¡Señor de los Señores!
¡Milagro de Milagros! La viergen salió
del cielo y bendijo esa unión.


Elvia Emilia Ramona Lefevre de Wirz - Madrid, 31 de julio de 1991

INTRODUCCION
-

Mis versos son los gritos del alma
de una mujer que comprendió que somos
el complemento de la creación divina,
con la fuerza de crear o destruir,
odiar o amar, y que nen el tiempo
y en el espacio sólo queda el misterio
de la muerte. A donde vamos ?

Dedico esta obra a los seres queridos
que compartieron los momentos plasmados en estos versos,
frutos de circunstancias historicas vividas con ellos y los otros.

A mis muertos queridos;
a mi padre, quien me enseñó que Patria no es un pasaporte,
Patria es la gente y un deber no...
> Lire l'article

QUIERO VOLVER A QUERERTE AMON
.

Quiero volver a quererte
como te quise
cuando era niña,
sin saber nada, amándote

¡ Qué importa saber
si se pierde el alma !
Amarte es tierno, blanco y bello,
sutil, perfumado, fortaleza.

Quiero volver a querer,
como se quiere la primera vez.
Tú das a mi feminidad
su dimensión completa.

Quiero quererte nuevamente,
como si el tiempo estático
penetrara mis vibraciones
y la energía respondiera en luz.

No me digas nada,
amor mío.
El silencio y la luz
son las delicias de un beso.

Mi...
> Lire l'article

ORDEN ESTABLECIDO
.

¡Orden establecido!
Falacia hipócrita
de unos gobernantes
esquizofrénicos!

La muerte violenta,
escrupulosamente
sádica, ha mantenido
la vida a prueba del dolor.

El tiempo se hacía infinito
en el dolor; y cada célula del cuerpo
en su conciencia individual y colectiva,
gemía ante la brutalidad del hombre.

Las tinieblas y el caos eran
tiernos y bellos ante el
oscurantismos de esos cerebros
crueles, sádicos e impasibles.

¡Orden establecido!
Falacia hipócrita
de unos...
> Lire l'article

AÑORANZA
-

A la vuelta de la esquina
vi una luz y una estrella:
eran tus ojos azules
y tu esbelta silueta.

Hermosa imagen
llena de alegría.
Las calles risueñas
cantan cuando tu caminas.

Un rincón y el torbellino
del pasado acumulan los recuerdos,
como papeles perdidos
buscando su dueño.

Pananá querida.
Panamá lejana.
Juventud perdida.
¡Esperanza viva!


Elvia Emilia Ramona Lefevre de Wirz

PARA ELLAS
-

Oh, amor del cielo,
divino torrente de luz
emblema de nobleza
radiante de belleza.

Doncella helénica,
pálido tu rostro
por no ver el sol
la luna te engaña.

En tu pecho duerme el lobo,
se seca tu juventud
cuando abres tus brazos
al cobarde ladrón.

En amor sólo hay un camino,
el del beber la vida
en su cáliz sublime de dolor,
de donde luego surge el retoño.

Que Osiris cubra tu cabellera,
que Hammon teja en ella su manto,
que de tu boca nazca la verdad
que tu alma y cuerpo...
> Lire l'article
Articles
Al Traves del Cristal

Gritos del Alma

Bibliographie